4 jun 2013

Etiquieta (REIGI)

“La vida cotidiana está llena de usos y costumbres que permiten la comunicación y disminuyen el riesgo de malos entendidos. En virtud de la etiqueta, podemos practicar con una seguridad total, disciplinar las tendencias agresivas, desarrollar la compasión, y el respeto mutuo.”  (Mitsugi Saotome Sensei)


El siguiente texto fue extraído del libro “Aikido Completo o La guía completa al camino de la Armonía”, escrito por Roy Suenaka y Christopher Watson.
Suenaka Sensei



ETIQUETA (REIGI)
La etiqueta es una parte esencial del estudio del aikido, como lo es en todas las artes marciales, por una serie de razones. Estudiar un arte marcial es una aventura honorable, y las personas honorables se comportan educadamente y se tratan unas a otras con respeto. Aunque no es necesariamente cierto que una persona con buenos modales sea honorable, la falta de educación es una señal de falta de respeto, hacia los demás y hacia uno mismo. Incluso la persona menos sofisticada, si es un budoka serio, exhibirá buenos modales.
Del mismo modo que la etiqueta le da estructura a la sociedad, la etiqueta adecuada (llamada reigi o reishiki) también le proporciona estructura a nuestro estudio del aikido. Existe una cierta manera de iniciar una clase, de conducir una clase y de concluir una clase. La etiqueta adecuada ayuda a mantener la clase en movimiento y proporciona una base común de referencia para todos los alumnos. La estructura que proporciona también ayuda a asegurar que la clase se lleve a cabo con seguridad. Los mejores budoka son las personas más corteses y humildes que uno puede llegar a conocer. La etiqueta y el entrenamiento en aikido van de la mano.

INCLINACIÓN
El modo en que uno se inclina, la duración de la inclinación, etc., puede tener profundos significados, de varias capas. No obstante, en el dojo las cosas son un poco más sencillas.
La inclinación es el modo en que un aikidoka muestra humildad y respeto. Algunos malinterpretan este inclinarse como una muestra de adoración o de servilismo, lo cual no es así. El inclinarse ante un compañero, instructor o el shomen, Kamidana o Kamiza (1) es un saludo, un reconocimiento de gratitud y de estar preparados para estudiar. Si usted no es capaz de captar esta diferencia, entonces tendrá dificultades para poner de lado el ego cuando entrene. Hay una máxima que suele repetirse en las artes marciales: “La utilidad de una taza es el estar vacía, pues una taza que esté llena no puede contener más”. En otras palabras, si se resiste a mostrar la humildad que se manifiesta en la inclinación, entonces, inevitablemente, se encontrará resistiéndose a la instrucción y a la corrección. Cuando se incline, ponga toda la atención en la acción. No deje que sus ojos o su atención divaguen.

(1) Altar shintoísta que suele presidir la sala de aikido.

SEIZA
El seiza, o estar sentado con las rodillas, dobladas, es la manera tradicional de sentarse en Japón, y en el dojo. Los japoneses consideran que es de mala educación sentarse mostrando las piernas y los miembros extendidos, o con las plantas de los pies a la vista. En el dojo, unos miembros extendidos no sólo demuestran una falta de respeto, sino que crean un peligro: es fácil tropezar con ellos, y una de las dos personas, o ambas, puede ser lesionada. A menos que se le indique lo contrario, cuando se siente sobre la colchoneta, debería sentarse siempre en seiza. Incluso cuando no está sentado en seiza debería tener las piernas cruzadas y los pies ocultos.

ETIQUETA GENERAL DEL DOJO
Las siguientes reglas deberían ser observadas en todo momento en el dojo:

ASPECTO E HIGIENE PERSONAL
Su gi debería estar siempre limpio. Lávelo siempre entre clases, o tenga dos gi, para tener siempre uno limpio para usar. Observe una buena higiene personal. Mantenga el cuerpo limpio, y utilice desodorante. Cepíllese los dientes y lávese el pelo. Mantenga las uñas de las manos y de los pies muy cortas para evitar arañar o hacer daño a su compañero al practicar.
Quítese los anillos, pulseras, pendientes, collares y cualquier otra joya antes de iniciar la práctica. Si lleva gafas, asegúrese de que estén bien sujetas a la cabeza con una cinta. Vende cualquier corte o abrasión menor y cubra el vendaje con una cinta adhesiva médica o deportiva para evitar que la venda se salga durante la práctica o debido al sudor.

CORTESÍA GENERAL
No mastique chicle en el dojo.
No actúe de forma alborotadora y no participe en juegos rudos ni en peleas amistosas en el dojo.
Trate a los demás como le gustaría que lo tratasen. Comunique cualquier conducta cuestionable que observe a su instructor principal.
Aunque las reglas y las filosofías concernientes al grado suelen variar ampliamente de escuela a escuela, generalmente está muy mal visto hacer preguntas a los superiores respecto de las promociones de grado, tanto suyas como de los demás. Si estudia con diligencia, será promovido. La discreción permanece enteramente con su sensei. No obstante, las preguntas sobre los requerimientos de la promoción de grado suelen considerase apropiadas, pero deberían ser formuladas antes o después de la clase.

CORTESÍA EN EL DOJO
Llegue al dojo lo suficientemente pronto para cambiarse y colocarse en su sitio en la colchoneta antes de que empiece la clase. Si llega al dojo cuando la clase ya ha comenzado, arrodíllese en seiza al borde de la colchoneta y espere a que el instructor principal lo reconozca y lo invite a entrar en la colchoneta. A menos que se le indique lo contrario, pida permiso al instructor principal en caso que tenga que salir de la colchoneta antes de que la clase haya finalizado.
Inclínese siempre ante el shomen en señal de respeto antes de entrar en la colchoneta y antes de salir.
No entre nunca en la colchoneta calzado. Utilice ojotas cuando no esté sobre la colchoneta. Colóquelas ordenadamente una al lado de la otra, con la punta mirando hacia el lado opuesto de la colchoneta, en el lugar asignado.
No se apoye sobre las paredes del dojo cuando se encuentre sobre la colchoneta, tanto si está de pie como si está sentado.
No cruce los brazos ni coloque las manos sobre las caderas o en los bolsillos cuando se encuentre sobre la colchoneta o dentro del dojo.
Siéntese siempre sobre la colchoneta cuando no se encuentre de pie. No se acueste ni adopte una postura desgarbada.
Cruce siempre las piernas cuando esté sentado sobre la colchoneta, a menos que esté sentado en seiza.
No muestre las plantas de los pies. Asimismo, no se toque los dedos o las uñas de los pies mientras esté sentado.

ETIQUETA GENERAL DE LA CLASE


Rei: saludo, inclinarse.

Onegai shimasu: ¿Puedo practicar con usted?

Domo arigato gozaimasu: Muchas gracias por permitirme practicar con usted

Dozo: se utiliza para dar permiso

Yame: Cesar; orden para finalizar el ejercicio

Sumimasen: por favor

O’Sensei: Gran Maestro. Sólo se utiliza en referencia a Morihei Ueshiba

Sensei: Maestro, profesor

Nage: El que ejecuta la técnica

Uke: El que recibe la técnica y cae

Tatami: Área de práctica


Suenaka junto a O Sensei
CLASE DE APERTURA
Colóquese en su sitio en la colchoneta cuando se lo indiquen, sentado en seiza. El instructor principal se arrodillará, mirando hacia el shomen. Tradicionalmente, los estudiantes se ponen en hilera mirando hacia el shomen, con el alumno o alumna, más antiguo sentado detrás y a la derecha del instructor principal, y el resto de la clase en hilera, en orden de grado descendente a su izquierda. Si es necesario formar más de una hilera, las sucesivas empiezan detrás del alumno más antiguo y continúan hacia la izquierda en orden descendente como antes. Siéntese tranquilo y prepárese para la clase. Permanezca donde está y espere la instrucción.

DURANTE LA CLASE
Permanezca atento a lo que lo rodea. Las clases de aikido pueden ser muy dinámicas, y es fácil arrojar a su compañero contra otra persona. Asegúrese de tener el espacio necesario para ejecutar una técnica antes de hacerlo. No interfiera con el aprendizaje de sus compañeros de clase moviéndose sin cuidado por la colchoneta como una motoniveladora, derribando todo lo que encuentra en su camino mientras practica. A nadie le gusta un acaparador de colchonetas.
Sea un buen uke o compañero de práctica. Esto significa a estar dispuesto a trabajar con cualquier alumno, sin importar si tiene más o menos experiencia que usted. Esto también significa ser sensible al nivel de destreza del alumno con el que está trabajando. La resistencia está bien, pero no porque sí.
Sea un buen nage. Esto significa respetar al uke y su cuerpo. No le aplique las técnicas con violencia, ni pretenda ver con cuánta fuerza puede arrojar a alguien. Un comportamiento así es el sello de un matón, y pronto descubrirá que nadie desea practicar con usted. Peor aún, quizá descubra que acaba siendo víctima de tal comportamiento. En último término, los malos genios se encenderán y alguien saldrá herido. La técnica ideal de aikido es el resultado del máximo control de su uke con el mínimo esfuerzo y dolor. Uno puede dominar por completo a su uke y, al mismo tiempo, hacer que se levante sonriendo. Este es uno de los sellos que distinguen a un auténtico aikidoka. No discuta cuando lo corrija el instructor principal. La corrección es orientación y hace que todos seamos mejores, y el estar dispuesto a aceptar las críticas es otra de las características de un auténtico budoka. Acepte la crítica dando las gracias, e inclínese ante el instructor cuando éste haya terminado.

FINAL DE UNA CLASE
Los convencionalismos para finalizar una clase suelen ser los mismos que para iniciarla. La única diferencia es que, después de la inclinación final hay que decir: “domo arigato gozaimasu”, en lugar de “onegaishimasu”. Siempre siga las reglas de su escuela.

RELÁJESE POR COMPLETO
Practicar el aikido con éxito y ejecutar la técnica del aikido correctamente exige un estado mental y corporal específico. Uno debe estar relajado y centrado, mentalmente tranquilo y consciente del ki. Cualquier atleta le dirá que debe estar relajado para tener una eficiencia y una destreza óptima. Aunque esto pueda parecer una contradicción de términos, no lo es. Ponga todo el cuerpo rígido e intente moverse con fluidez. No podrá hacerlo. Lo mismo se aplica al aikido. Para ejecutar con éxito una técnica de aikido, debe estar lo más relajado posible.
La diferencia entre extender el ki en su técnica y no extenderlo será rápidamente evidente a medida que practique. Cuando el ki no está fluyendo, uno siente que está utilizando todos los músculos para ejecutar la técnica. Colisionará con su compañero y ambos se sentirán frustrados, y física y mentalmente cansados. Cuando el ki fluye, su técnica fluirá. Sus movimientos parecerán como una danza. Su compañero disfrutará siendo arrojado, y lo más probable es que los dos terminen sonriendo.

LA MECÁNICA DE LA RESPIRACIÓN
La manera apropiada de respirar es la respiración abdominal profunda, lo que los profesores de voz y de dicción denominarían respiración de diafragma; es decir, respirar desde el músculo del diafragma. Este músculo se encuentra en la base de los pulmones, justo encima del estómago. Cuando inspiramos, el diafragma se contrae, creando un vacío en nuestros pulmones que atrae el aire hacia adentro. Cuando exhalamos, el diafragma se relaja, dejando salir el aire y el CO2 (dióxido de carbono). Esta contracción y relajación del diafragma es lo que hace que nuestro estómago se mueva hacia fuera y hacia adentro cuando respiramos. Cuánto más profundamente inspiramos, más se expande nuestro estómago, y viceversa.

LA CONCIENCIA DE LA RESPIRACIÓN EN EL AIKIDO
La importancia de la respiración en el aikido va más allá de la mera eficiencia física. Una de las palabras japonesas para decir respiración y respirar es kokyu. Kokyu significa llevar la respiración hasta lo más profundo del hara, su punto uno, utilizándolo para reunir y centrar el ki, y luego exhalar el ki a través de todas las fibras de su ser. Observe que muchas técnicas y movimientos empiezan con kokyu-nage, por ejemplo. La traducción literal de kokyu-nage es “proyección de la respiración”. En su aplicación se refiere a la técnica de utilizar la respiración para reunir y centrar el ki y para capturar el ki del atacante, y luego utilizar esa energía para ejecutar la técnica. Para hacer esto correcta y consistentemente, uno debe entrenar con intención la respiración y practicar la consciencia de la respiración.
El grado de dificultad en la respiración o de “falta de aire” dependerá en gran medida de su estado físico general, pero, independientemente de su nivel de salud general, la respiración adecuada y la consciencia de la respiración le proporcionarán más energía y resistencia, y mejorará su técnica.

ESTIRAMIENTOS
Los estiramientos son importantes siempre que uno está a punto de iniciar cualquier actividad física. Cuanta más dinámica es la actividad, más importantes son los estiramientos. Incluso los aikidokas más flexibles se toman siempre unos minutos para estirarse antes de la práctica: es por eso que son flexibles. No obstante, como todo en el aikido, se necesita tiempo y una práctica constante para alcanzar la máxima flexibilidad, y hay maneras específicas para conseguirlo.

LOS BENEFICIOS DE LOS ESTIRAMIENTOS
Aikido es una actividad muy dinámica. Uno debe ser capaz de moverse con rapidez y fluidez, de mantenerse relajado incluso en las situaciones más dinámicas, y a caer y a recibir llaves de muñeca y de articulaciones sin salir lesionado. Cuanto más flexible sea uno, más fácil es todo esto. Inversamente, cuanto menos flexible se es, más probable será que salga lesionado. Es tan sencillo como la diferencia entre una rama verde y flexible de un árbol y una seca y rígida. Mientras que la rama seca se rompe fácilmente, la verde requiere un esfuerzo mucho mayor para romperla, simplemente porque es flexible. Incluso cuando es más pequeña que la rama seca, su flexibilidad la hace mucho más fuerte.
Los estiramientos tienen, además, beneficios mentales y espirituales. La flexibilidad del cuerpo ayuda a cultivar la flexibilidad de la mente y del espíritu. Una persona que siempre está tensa y rígida, probablemente se comportará de una forma que refleje este estado.
Siempre debería estirarse concienzudamente antes de cada práctica. Estirarse concienzudamente significa estirar todos los principales músculos del cuerpo, desde los dedos del pie hasta el cuello. No realice los estiramientos con prisa. Antes bien, realícelos con calma. Cuando alcance su límite, mantenga el estiramiento, contando, por lo menos, hasta diez, y más a medida que se vaya haciendo más flexible. Quizá descubra que se está resistiendo inconscientemente al estiramiento tensando el músculo, especialmente al acerarse a su límite. Cuando esto suceda, relaje lo más posible el músculo que está siendo alongado. Esto no sólo ayudará a intensificar el estiramiento, sino que además hará que las molestias disminuyan. Acuérdese de respirar siempre mientras realiza los estiramientos.

CAER Y RODAR (UKEMI)
Aunque el ukemi suele definirse comúnmente como caída o caída adecuada, es más que eso. Al igual que uke significa la persona que recibe una técnica, ukemi, definido con propiedad, significa métodos de recibir esas técnicas sin peligro.
Suenaka Sensei
Se podría argumentar fácilmente que ukemi es la clave para una comprensión absoluta del aikido. El estar dispuesto a recibir el ukemi, es una de las características de un auténtico aikidoka. O’ Sensei creía que el uke y el nage eran uno, pues sin el uke no había necesidad del nage. Por tanto, para ser un buen nage se debe también ser un buen uke, y a estar dispuesto tanto a recibir como a dar, y ser capaz de hacerlo. Que lo reconozcan como a un buen uke es uno de los mejores cumplidos que un aikidoka puede recibir, y se considera un honor que a uno le pidan que reciba un ukemi para un alumno durante las pruebas de promoción de grado, pues únicamente el mejor uke está a la altura de dicha tarea.
Aunque un aikidoka experimentado puede hacer que su técnica funcione contra un uke poco experimentado, el conocimiento del ukemi es lo que impide que el uke se lesione durante la práctica.
Ciertamente que ukemi no significa saber cómo recibir un puñetazo; significa saber cómo recibir una técnica sin peligro, sin ser lesionado.